Gestos y Símbolos de la Celebración Eucarística
La Imposición De Manos
Imponer sobre la cabeza de uno las manos tiene significados
distintos.
En el Nuevo Testamento la acción e imponer sobre la cabeza
de uno las manos tiene significados distintos, según el contexto en el que se
sitúe. Ante todo puede ser la bendición que uno transmite a otro, invocando
sobre él la benevolencia de Dios.
Así, Jesús imponía las manos sobre los niños, orando por
ellos.
La despedida de Jesús en su Ascensión, se expresa también
con el mismo gesto: 'alzando las manos los bendijo' (Lc 24,50).
Es una expresión que muchas veces se relaciona a la
curación. Jairo pide a Jesús: 'Mi hija está a punto de morir; ven impón tus
manos sobre ella para que se cure y viva' (Mc 5,23).
Imponer las manos sobre la cabeza de una persona, significa
en muchos otros pasajes, invocar y transmitir sobre ella el don del Espíritu
Santo para una misión determinada. Así pasa con los elegidos para el ministerio
de diáconos en la comunidad primera: 'hicieron oración y les impusieron las
manos' (Act. 6,6).
Hay dos momentos en la celebración de la Eucaristía en que
el gesto simbólico tiene particular énfasis.
Ante todo cuando el presidente, en la Plegaria Eucarística,
invoca por primera vez al Espíritu (epíclesis), extendiendo sus manos sobre el
pan y el vino: 'santifica estos dones con la efusión de tu Espíritu'.
La Bendición Final es el segundo momento en el que el gesto
de la imposición adquiere especial énfasis.
Este gesto nos habla también del don de Dios y la mediación
eclesial:
Estupendo binomio: la mano y la palabra. Unas manos
extendidas hacia una persona o una cosa, y unas palabras que oran o declaran.
Las manos elevadas apuntando al don divino, y a la vez mantenidas sobre esta
persona o cosa, expresando la aplicación o atribución del mismo don divino a
estas criaturas.
La mano poderosa de Dios que bendice, que consagra, que
inviste de autoridad, es representada sacramentalmente por la ,mano de un
ministro de la Iglesia, extendida con humildad y confianza sobre las personas o
los elementos materiales que Dios quiere santificar.
HERMANO + HERNANDO
NON NOBIS DOMINE NON NOBIS SED NOMINI TUO DA GLORIAM