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sábado, 8 de octubre de 2016

CAÑON DE RIO LOBOS

El Hermano Fr.+ Krasimir hizo una visita al Parque Natural Cañón del Río Lobos, ubicado en la provincia de Soria y Burgos.
Dicho parque está considerado como uno de los paisajes más bellos de España por la espectacularidad de su relieve, un singular espacio sobre el eje de un profundo cañón de escarpados farallones.


En su interior destacan extensos bosques de sabinas y pino laricino, además de su riqueza faunística, destacando las parejas de buitres leonados, siendo importante reserva de esta especie, águilas reales, alimoches y halcones. Entre los mamíferos abundan los corzos, jabalíes, ardillas, nutrias, tejones y gatos monteses.



Un lugar donde hacer un hermoso recorrido a pie, que nos dirige entre paisajes a la ermita de San Bartolomé, uno de los enclaves más importantes- y sorprendente en su entorno- de la orden de los caballeros templarios, a partir de la cual podemos contemplar este cañón en todo su esplendor; acompañados en el camino por el río Lobos, con nenúfares flotantes, aguas que aparecen y desaparecen intrigando al caminante. Sin duda, una belleza sin palabras, que solo descubriremos en su visita.



RUTA

La más común es la que nos lleva desde Ucero hasta el Puente de los Siete Ojos, con un recorrido de unos 12 km, pero es posible prolongarla hasta la localidad de Hontoria del Pinar, durante otros 12 km, completando de esta forma el recorrido completo del cañón. Nosotros haremos la primera parte que discurre íntegramente por la provincia de Soria.



Partimos de la atractiva localidad soriana de Ucero, que cuenta con los restos de un antiguo castillo templario del siglo XII. Desde el pueblo nos dirigiremos hacia el río, pasando por el Centro de Interpretación (Casa del Parque) donde se ofrece información de todas las actividades que se pueden realizar en el parque y que cuenta con una exposición de los valores naturales del mismo.


Continuamos sin pérdida esta primera etapa durante aproximadamente 3 km hasta llegar a la hermosa ermita de San Bartolomé, antiguo templo románico del monasterio templario de San Juan de Otero, construido en el primer tercio del siglo XII. Detrás de la ermita se halla la Cueva Grande, una de las numerosas cuevas con que cuenta la zona, realmente espectacular y que podemos admirar con tranquilidad.


A partir de aquí atravesaremos un puente de madera para iniciar la segunda etapa de unos 9 km aproximadamente que nos llevará al Puente de los Siete Ojos, en el límite de la provincia de Soria.

El camino resulta cómodo, sin apenas desnivel, divisando enseguida la espectacular y agujereada pared rocosa del Colmenar de los Frailes. En este tramo el río va estrechando su cauce, haciendo aún más impresionantes los enormes paredones del cañón, teniendo que cruzar el río varias veces, una de ellas en la confluencia del arroyo de Valderrueda con el río Lobos. En gran parte de la ruta tendremos la ocasión de contemplar la abundante y valiosa fauna que puebla este espacio natural entre la cual destacan los buitres leonados, que habitan en los enormes agujeros de las rocas, además de diversos tipos de águilas (real, culebrera y calzada), halcones, alimoches, azores, etc.

Llegamos a la zona de la fuente del Rincón donde hay un roquedal de bóveda grande y un acceso indicado para poder ver la Cueva Negra, otra de las cavidades del cañón. Seguimos el camino cercano al río y alcanzamos la zona de Las Fuentes, por donde pasa la senda de la Cañada Real Merina (PR 49), uno de los numerosos senderos que discurren por el parque natural. En este punto el cañón se abre paso entre densas masas de pino negral, el camino se convierte en pista que atraviesa el río varias veces, hasta llegar el Puente de los Siete Ojos, final de este tramo y de nuestra ruta.

A partir de aquí entraríamos en la provincia de Burgos y sería posible continuar la ruta por el cañón durante unos 12 km más, hasta la localidad de Hontoria del Pinar. Esta parte del cañón es menos visitada, pero no por ello menos hermosa, y cuenta con el atractivo de ser mucho menos transitada.


Aunque el sentido de la ruta está puesto desde Ucero hasta el Puente de los Siete Ojos, es mucho más recomendable hacerlo en sentido inverso ya que así comenzamos de menos a más, terminando en el hermoso lugar donde se halla la Ermita de San Bartolomé. Además, en este sentido, si madrugamos, encontraremos mucha menos gente.

NON NOBIS DOMINE NON NOBIS SED NOMINI TUO DA GLORIAM