La
Hipocresía, te corroe el alma. Es el peor sentimiento, que puede alojarse en
nuestro interior. Los hipócritas te dan
una cara y por detrás te destrozan ,pobres seres sin riqueza interior ,y
cobardes, que no son capaces de enfrentarse y decir su verdad, y siguen
solapadamente, haciéndose pasar por amigos ,cuando en su interior lo que
guardan es odio, rencor ,envidia. Se curte el alma con la hipocresía.
Y lo
lamentable de todo, que la hipocresía esta regada por todas partes y, porque
allí metemos las de familias y de los Hermanos, y lo más triste, de los amigos,
que es algo de tanto valor, porque la amistad es un tesoro que debemos guardar
en lo más profundo de nuestro interior, y conservarlas como uno de los
sentimientos más puros.
Quedo en
ocasiones impresionado, como las
personas, hacen de la hipocresía un arte, formando parte de sus vidas y es tan
común en ellas, que logran, en ocasiones, engañar a los demás.
En realidad
los hipócritas no tienen vida, ni ellos
se toleran; forman parte del lado oscuro del ser humano.
Tienen una
vida falsa como la de ellos mismos, viven en un círculo vicioso; sus caras son
una máscara eterna.
Me
pregunto... ¿pueden vivir tranquilos?
Pero, siempre me he hecho una pregunta, ¿los hipócritas viven en paz con
ellos mismos? ¿Podrán dormir bien?
Existen
casos lamentables de personas tan limpias de almas y espíritu, que al darse
cuenta que han caído en las garras de Hipócritas, se auto exilian.
Yo en lo
particular, prefiero enfrentarlas y descubrirle su lado oscuro, dejar que su
rostro quede al descubierto, tal como son, mostrar sus miserias, para evitar
que sigan llenando de lodo el ambiente donde están.
Como
socavan el alma de las personas que confían en ellos.
Como pueden
en su mente maquiavélica preparar todo un escenario, para burlarse de los demás
y disfrutarlo con su sangre fría.
El
hipócrita esta a tu lado, y lo puedes determinar por sus acciones, pero a veces
su máscara es tan perfecta que es difícil detectarla.
He vivido
momentos muy dolorosos al comprobar lo falso que puede llegar a ser una
persona, y del cómo te engañan aparentando una amistad o sentimiento, que no
está ni cerca de sentirse.
He tenido
experiencias con supuestos amigos(as) que hasta lagrimas han derramado, y que
triste descubrir, que solo era simple y muy concentrada hipocresía.
Sin
embargo, puedo afirmar, en estos momentos de mi vida, que he aprendido a
distinguir la verdadera amistad con los que se hacen ser amigos, los que
aparentan un sentimiento, pero, que al trasluz, se le ven las costuras.
NON NOBIS DOMINE NON NOBIS SED NOMINI TUO DA GLORIAM