Distante de
Porreras, algo más de un kilómetro se levanta el llamado Puig de Montesión,
cuya altura es de unos 138 metros sobre el nivel del mar.
La
antigüedad de la Ermita no se conoce con exactitud pero se calcula que data del
siglo XIV. En el año 1498 se comenzó la construcción de una nueva capilla que
es la actual, siendo dedicada también a la Virgen bajo la advocación de Nuestra
Señora de Montesión. La imagen era de estilo bizantino tallada en madera, pero
en 1734 se sustituyó por una figura de María Santísima labrada en mármol
blanco, siendo costeada por la noble familia Duzay, cuyo escudo de armas figura
en la peana.
En 1551
funcionaba una escuela de gramática latina y durante este tiempo fue construido
un gran patio delante del Oratorio, con una cisterna en el centro y celdas
alrededor formando un pentágono de forma irregular, con un pórtico de tres
metros de ancho, sostenido por esbeltas columnas.
De muchos
pueblos acudían a las aulas de manera que en el año 1679 pasaban del centenar
los alumnos que recibían instrucción.
En 1694 se
tuvo que construir una gran sala para dar explicaciones, hoy día se conserva
con el nombre de “s’aula”. La escuela duró hasta finales de 1835.
En 1890 el
que fue Obispo de Mallorca Pedro A. Campins por entonces párroco de Porreras restauró el Oratorio con la ayuda de los
feligreses y en la actualidad se halla bien conservado.
En cuanto
al camino antiguo que conducía al Santuario era áspero y difícil para la
locomoción de nuestros días, en 1954 el Ermitaño Samuel, muy perito en el
trazado de carreteras, fue invitado para replantear una nueva. Así lo hizo y en
el día fijado el pueblo en masa ayudó a construir en un solo día la nueva
carretera.
NON NOBIS DOMINE NON NOBIS SED NOMINI TUO DA
GLORIAM